Como padres, realizamos una diligencia debida al comprar un automóvil que mantendrá a nuestros hijos seguros cuando estemos en la carretera. Solo elegimos asientos de automóvil que cumplan (o excedan) los estándares de seguridad. Seguimos el límite de velocidad y conducimos de forma defensiva. ¿Pero qué pasa con esos peligros relacionados con el automóvil a menudo pasados por alto?
A continuación se presenta un esquema de cuatro peligros potenciales asociados con el automóvil familiar y cómo puede mitigar el riesgo para su familia.
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- Atrapamiento en el maletero – El maletero de un automóvil puede ser un escondite tentador para un niño curioso. Un niño que se arrastra dentro de un maletero está en peligro de quedar atrapado, donde las temperaturas pueden aumentar rápidamente. Un niño atrapado corre el riesgo de sufrir asfixia y/o golpe de calor.
Cómo prevenir lesiones: Los vehículos fabricados después de septiembre de 2001 vienen equipados con una palanca de liberación de emergencia que brilla en la oscuridad (los vehículos más antiguos pueden ser equipados con esta característica). Enséñele a su hijo a mantenerse alejado y fuera del maletero y cómo usar la palanca en caso de emergencia. Siempre bloquee las puertas del automóvil y el maletero cuando no esté cerca del automóvil y mantenga las llaves del automóvil fuera del alcance de las manos pequeñas.
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- Golpe de calor – La temperatura interior de un automóvil puede aumentar a una tasa mucho más rápida que la temperatura externa, particularmente en un clima soleado como el de la Florida del Sur. Un niño dejado solo en un automóvil puede sucumbir rápidamente a los efectos potencialmente letales del golpe de calor.
Cómo prevenir lesiones: Nunca deje a un niño solo en un automóvil, incluso por unos minutos, incluso si las ventanas se dejan parcialmente abiertas. En los días en que su rutina cambia, como cuando un padre diferente al habitual recoge al niño de la guardería o la escuela, sea particularmente vigilante al comprobar dos veces si su hijo está allí cuando salga del automóvil. Mejor aún: deje su cartera o maletín en el asiento trasero para que tenga un recordatorio de mirar allí.
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- Accidentes de retroceso – Los accidentes de retroceso generalmente ocurren cuando un conductor sale de un lugar de estacionamiento, garaje o entrada de automóviles y no ve a un niño detrás del vehículo. Estos accidentes pueden resultar en lesiones graves o fatales para las víctimas jóvenes.
Cómo prevenir lesiones: Enséñele a sus hijos sobre los peligros de jugar cerca o detrás de los vehículos estacionados y por qué deben alejarse de un automóvil que ha comenzado. Antes de subir a su automóvil, camine alrededor del vehículo para asegurarse de que no haya niños en el área. Continúe revisando los espejos mientras retrocede: los niños pueden moverse rápidamente hacia la línea de peligro.
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- Accidentes de deslizamiento – Un niño sin supervisión puede inadvertidamente cambiar un automóvil estacionado de “Park”, lo que provoca que se deslice hacia el tráfico u otros peligros. Esto puede suceder incluso cuando el vehículo está apagado, siempre y cuando se dejen las llaves en el encendido.
Cómo prevenir lesiones: Nunca deje a un niño sin supervisión en un vehículo, incluso para “paradas rápidas”, como correr dentro del banco o la tienda de comestibles. Mantenga su automóvil cerrado cuando no esté presente y enséñele a sus hijos que el automóvil no es un área de juego aceptable. Para mayor tranquilidad, siempre active el freno de emergencia al estacionar su vehículo.